Ex pelotero dominicano Juan Domínguez enfrenta la pobreza y busca rehabilitación
El exlanzador dominicano Juan Domínguez, quien en el pasado brilló en el béisbol de las Grandes Ligas, vive actualmente una situación de extrema pobreza en el municipio de Mao, provincia Valverde, República Dominicana. En su humilde vivienda de zinc y piso de cemento, sin baño ni comodidades básicas, Domínguez lucha por reconstruir su vida tras enfrentar adversidades personales y profesionales.
Una carrera que prometía grandes éxitos
Domínguez debutó en las Grandes Ligas en 2003 con los Texas Rangers, donde lanzó durante tres temporadas, participando en 32 juegos, 17 de ellos como abridor, y acumulando una efectividad de 4.60. Posteriormente, fue cambiado a los Oakland Athletics por los lanzadores John Rheinecker y Freddie Bynum. Sin embargo, una lesión en el tobillo durante su paso por la sucursal Triple A de los Athletics marcó el inicio de una serie de desafíos. A ello se sumó la pérdida de su madre, un golpe emocional que afectó profundamente su vida y carrera.
Tras ser dejado en libertad por los Athletics en 2006, Domínguez firmó con los Saraperos de Saltillo en México, donde tuvo una breve actuación. Su rendimiento no logró igualar las expectativas, y con el tiempo, se vio alejado del béisbol profesional.
Una realidad marcada por la pobreza
Actualmente, Domínguez enfrenta una vida llena de limitaciones económicas. Vive en una pequeña casa sin las condiciones básicas necesarias y sin ingresos estables para subsistir. Ha expresado su deseo de ingresar a un centro de rehabilitación en Santiago, para lo cual solicita apoyo financiero de 5,000 pesos mensuales. Su sueño es recuperar su salud y, eventualmente, regresar al béisbol como pitcher o instructor, aportando sus conocimientos a una nueva generación.
Un llamado a la reflexión para los jóvenes jugadores
En un mensaje conmovedor, Domínguez exhortó a los jugadores jóvenes a aprender de su experiencia y a ser responsables con sus finanzas. “El béisbol es una de las profesiones más millonarias del mundo, pero ahora que estoy fuera no tengo con qué mantenerme”, señaló. Además, aconsejó evitar las sustancias prohibidas, ahorrar de manera inteligente y mantener a Dios como guía en sus vidas.
El apoyo de las autoridades y la comunidad, una necesidad urgente
Domínguez ha pedido ayuda a las autoridades locales y a las figuras del béisbol para que lo respalden en su lucha por salir adelante. Mientras tanto, continúa enfrentando las dificultades de la vida diaria, con la esperanza de superar esta etapa y volver a contribuir al deporte que le dio tantas alegrías.